Esclavos del tiempo. Productos de la memoria

Photo by Pixabay on Pexels.com

«El tiempo se mueve en una dirección, la memoria en otra»

Somos esclavos del tiempo. Aunque estemos de vacaciones.

Pensando a qué hora tenemos que salir para que no haya trafico, a qué hora tenemos que entrar en la habitación de hotel, a qué hora sale nuestro avión de regreso, a qué hora es el buffet libre…

Las decisiones que tomamos están basadas en el tiempo.

No tengo tiempo para verte, no tengo tiempo para hacer lo que realmente querría hacer, se me está pasando el tiempo y no he hecho nada….

Sean vacaciones o cualquier día, todo lo hacemos en función del tiempo.

¿Por qué?

Porqué pensamos que tener una vida ajetreada es tener una vida feliz, a la que los demás le tendrán envidia. Pero además de eso, pensamos sino que la vida se nos escapa, que si tenemos una agenda vacía en algún momento, es la muestra que somos personas solitarias, que no tenemos amigos o que nadie nos quiere.

Y de repente viene una enfermedad, un bicho o cualquier inconveniente que no teníamos agendado en nuestra agenda y el tiempo se para.

Aquello que ponía la agenda , ha desaparecido. Ya no tienes deberes, ya no existen las obligaciones de ir a buscar a tus hijos o ir al «after work» de los jueves de la empresa.

Eso que tanto soñábamos de tener tiempo para nosotros, es una realidad. Pero el problema es que no sabemos qué hacer con él.

Tanto tiempo para nosotros, para hacer lo que sentimos, para escucharnos, para estar en silencio o lo que nos de la gana… No sabemos qué hacer con él.

¿Por qué?

Porqué hemos aprendido que estar ocupado , es ser un hombre de provecho. Cuántas más obligaciones, mejor. Cuantos más recados tengas que hacer, mejor. Cuantas más actividades tengas a lo largo del día, mejor.

Mejor, porque pensarán que eres una persona de éxito, que eres feliz y hasta das confianza. Confianza que no dará una persona que tenga una agenda enfocada para pensar en lo que quiere hacer con su vida o lo que realmente le pasa en la vida. Pensaremos que es un vago, que no quiere trabajar o vete a saber qué.

Si no ocupas tu tiempo, no siempre estás desocupado., quizá estás viviendo de verdad.

Somos esclavos del tiempo y victimas de la impaciencia. Impaciente para que llegue cuanto antes lo que hemos soñado, lo que creemos que nos merecemos, lo que exigimos por el esfuerzo que hemos realizado.

Somos esclavos del tiempo y queremos que corra más de lo que corre, lo exigimos.

Pero luego sin embargo, somos producto de la memoria.

No hay conversación en la que oigas alguna vez: «Recuerdas cuando..»

Nos pasamos la vida reviviendo el pasado con el deseo que vuelva a suceder. Algo que menos en las películas de Hollywood, no pasará.

Recordamos cuando creíamos que éramos felices, cuando disfrutábamos de la vida, cuando teníamos energía…Cuando lo que sea, pero siempre en el pasado… ¿Y qué pasa con el presente? Lo rechazamos, solo queremos volver al pasado.

En el pasado creíamos que teníamos menos obligaciones, que nos importaba poco lo que dijeran o hicieran los demás, vivíamos y no subsistíamos ¿Pero que ha cambiado? ¿Qué hemos madurado? ¿O que nos hemos olvidado de quienes éramos o ser quienes nos recomiendan que seamos?

Somos producto de la memoria y lo peor de todo, nos apegamos a ella. Olvidándonos de algo esencial, que somos las experiencias que hayamos podido vivir pero que siempre las recordamos en el presente, que es lo único certero que tenemos.

¿Cómo dejar de ser esclavo del tiempo?

Haciendote dueño de él.

¿Cómo dejar de ser un producto de la memoria?

Dándole las gracias por lo aprendido y vivido mirando al presente.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.