Soledad

Cada día encuentro más miradas vacías.

Miradas que no dicen nada, ni tristeza ni alegría y ni mucho menos ilusión.

Miradas que solo buscan una cosa, respuestas.

Respuestas a preguntas que hasta la fecha no se habían realizado.

Preguntas para que sirven, si realmente quieren vivir la vida que están viviendo o porqué seguimos los consejos de los demás cuando realmente nosotros queríamos haber hecho otras cosas.

Cada día recorro las calles de mi ciudad y me gusta fijarme en la mirada de los demás. Y lo que encuentro son miradas que tienen miedo mirar al frente, de encontrarse con los demás, de encontrarse con su verdad. Otras están tapadas por gafas de sol. Miradas escondidas que no quieren que se las encuentre. Que veamos que desde hace tiempo dejaron de llorar preguntadose dónde están las respuestas que buscaban y que tanto necesitaban, dejándose llevar en la actualidad sin querer ya pensar por si mismos

Cada día siento que se aprende más observando a la gente que a través de estadísticas o modas. Y cada día creo que esa soledad que tanto sentimos es porqué no nos llevamos bien con nosotros mismos.

Personas que encadenan una relación tras otra pensando que son «alguien» si están en pareja… Trabajadores que no entienden porqué están somatizando enfermedades si expresasen que realmente lo que les haría felices es hacer otro trabajo totalmente diferente. Personas que están enguachadas a libros de «felicidad», cursos y congresos pero cuando llega la noche se preguntan porqué a pesar de todo siguen estando cómo están, gente que mantiene en secreto su sexualidad por miedo al qué dirán, personas que luchan a escondidas por sus sueños, no vayan a pensar que están locos o algo así…

Podemos echar la culpa a la sociedad, a los estereotipos o a las presiones familiares por sentir que nuestros padres nos quieren o somos aceptados por los demás. Y no te faltará razón en muchas ocasiones. Somos una sociedad que quiere la paz, la felicidad y el desarrollo, la igualdad y un mundo ideal pero en realidad y en el día a día, somos unos grandes cabrones con el prójimo.

Taponamos el avance del vecino, mentimos para que no avance a pesar de que sabemos que lo podría conseguir, ponemos normas para tener a todo el mundo controlado y no le damos libertad alguna para crear, para que descubra y desarrolle su talento, su deseo…Hablamos de avance y mientras tanto ponemos piedras en el camino para que no lo hagan.

¿Y qué hacemos? ¿Quejarnos de que la culpa de todo la tienen los demás? ¿De tirar la toalla por nuestra soledad y acostumbrarnos a lo que nos dan?.

Muchos años me quejaba que no avanzaba por culpa de los demás. Cuando aprendí que «el principio del comienzo» empieza por uno mismo, las cosas cambiaron. Mi mundo cambió cuando empecé a cambiar yo.

Los demás que hagan lo que quieran, los demás que se tiren los pelos o lo que sea…si yo estoy mal, ¿POR QUÉ LO ESTOY?

Y tú lo sabes mejor que cualquier otro. O al menos lo intuyes. Pero lo que ocurre que nos da miedo hablar, nos da miedo expresarnos. Y no es que no sepas expresar lo que te pasa, sino que te da vergüenza decirlo no vayan a tildarte de loco o vete a saber qué . Cuando sabes qué te pasa, una palabra puede describirlo todo perfectamente. No hace falta la expreses, puedes escribirla, pintarla o hacer un grafiti.. El medio es el que mejor te sientas tú pero EXPRESA

Durante el día cotorreamos, no hablamos.

Invertimos el día hablamos de mierdas, de cosas sin importancia. ¿Y lo importante? Nos lo callamos, por miedo. ¿Miedo a qué? Es lo que sientes, es lo que quieres decir, es la ayuda que sabes que necesitas. ¿A qué tienes miedo? ¿Al que puedan decir que eres vulnerable y se rían porqué llora? Esa gente no te ha merecido ahora y nunca.

Cuando expresamos lo que sentimos, nos damos cuenta que no estamos solos como nos imaginábamos., sino más acompañados de lo que nos creíamos. Lo que pasa es que el miedo, nos hace creer cosas que no son así.

Podemos echar la culpa a la sociedad, que no nos enseñan a gestionar nuestras emociones, que ciertas generaciones no saben expresar sus emociones y así han criado a sus hijos, que en casa no se habla de debilidades… Te lo vuelvo a repetir… busca

A pesar de estar cada día más «rodeados» de gente, cada día estamos más solos. Es una frase que se oye habitualmente. Y estoy de acuerdo con ella, cada día tenemos más oportunidades de relacionarnos con gente pero cada día nos sentimos más solos. ¿Y todo por qué? PORQUÉ TENEMOS MIEDO A HABLAR CON EL CORAZÓN.

Nos han enseñado a hablar con la razón, a hablar en función de las expectativas que tienen sobre nosotros en el presente o en el futuro, dejando al corazón de lado. Y por eso nos encerramos más y más en nosotros mismos, porqué la razón no sabe gestionar lo que nos pasa. Ahí es cuando debes poner en marcha tu corazón, es el que rompe las barreras de tu aislamiento

Desde luego que no estoy diciendo que con eso ya está todo hecho. Yo fui dos años a un psicólogo y lo recomiendo a todo el mundo. Lo que te estoy diciendo es que:

¿Qué ocurriría si escucháramos antes a nuestro corazón y no nos dejáramos guiar tanto por la razón?

¿Qué ocurriría si hablásemos desde el corazón y no con una mascara llamada razón?

Quizá la razón no sabe gestionar cosas en las que el corazón es experto.

¿Por qué la soledad? Porqué llevamos tiempo sin escucharnos a nosotros y escuchando más a los demás.

De cerca, NADIE es normal

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«Pues si parecía una persona normal«.

Es una frase que siempre oímos cuando nos hemos enterado de un suceso de una persona que conocemos y que nos ha sorprendido que así ocurriera.

¿Pero por qué decimos lo mismo de siempre?

Porqué no conocemos a las personas de verdad.

Y conocer a las personas no es acostarse con ella, tomarse una copa o verse una vez a la semana.

Eso no es conocer a las personas.

Porqué eso son amigos de «conveniencia» que mandarás a la mierda cuando te «tuerzan» el morro con algo que te han dicho que no querías oír.

Creemos que el mundo es normal porqué sigue las normas que creemos que se deben seguir, tener un trabajo, tener pareja, salir los sábados por la noche con los amigos o la pareja de amigos y tener hijos.. Si ya cumplen todos los requisitos que no sé quien ha dicho que son los requisitos para ser considerado «persona normal, ya podemos etiquetarlos de «normales».

Pero ¿Qué pasa cuando conoces de verdad a una persona? ¿Qué pasa cuando estás en las buenas y en las malas con esa persona que considerabas «normal»?

QUE TE DAS CUENTA QUE LAS PERSONAS DE CERCA, NINGUNA ES NORMAL.

Y eso es lo que nos hace auténticos, únicos , ser mágicos o como tú quieras llamarlo… Pero de cerca, NADIE ES NORMAL.

A día de hoy, creemos que con tener una red de seguidores importante en redes sociales ( y da igual si son seguidores comprados ), ya podemos ser considerados personas sociales, de éxito, de confianza y hasta con talento. Creemos que conocemos a las personas que nos siguen y nosotros, a las personas uqe seguimos. Las consideramos personas normales, como nosotros y hasta creemos conocerlas.

A día de hoy decimos y creemos creer que conocemos a toda persona con la que nos relacionamos, aunque sean 5 minutos al año lo que nos relacionamos con ella.

Eso no es conocer ni es nada, eso es un conocido o la vecina del 5º que ves de vez en cuando y solo te dice «Hola y Adiós», nada más.

A día de hoy creemos que toda persona que se relaciona con nosotros, es una persona normal. ¿Por qué? Porqué creemos que es un reflejo nuestro, porqué no se sale de lo establecido. Pero luego, si realmente conociéramos a esas personas, veríamos que de NORMAL no tienen nada. Y quizás verías cosas que no te gustarían.

Pero ni ellos ni tú.

NADIE ES NORMAL, TODOS TENEMOS NUESTRAS TARAS Y TALENTOS, NUESTROS MIEDOS Y SUEÑOS.

Pero lo que ocurre, que llamamos personas normales, como escudo para no conocerlas de verdad, para no saber cómo piensas, para tener muchas relaciones pero pocas de calidad…

De cerca, TODOS NADIE ES NORMALES.

¿Lo más transgresor?…UNA BUENA CONVERSACIÓN!!

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«Si el contenido es el rey, la conversación es la reina» dice John Munsell.

¿Quieres saber lo que te hará más feliz? ¿Quieres saber qué te llevaría al éxito inmediato? ¿Quieres saber qué te haría más «cool» delante de los amigos?

SABER MANTENER UNA CONVERSACIÓN.

Mira si me vienes diciendo que ahora no mantenemos conversaciones por la mascarilla, ES UNA EXCUSA BARATA. Una conversación es el método más rapido e infalible contra la incertidumbre, término tan manido en estos momentos.

Pensamos que ya habrá tiempo de tener esa conversación con esa persona, de decirle lo que sentimos, de lo que la queremos o que no somos quién para meternos en su vida a pesar de que la veamos mal. Y luego, de un día a para otro, ya no se podrá celebrar.

¿Y ahora qué hacemos? Lamentarnos y fustigarnos, pensando que somos tontos por no haber tenido el valor de provocar esa conversación. Porqué podrás decir que no tenías tiempo, que te venía mal y luego ya te olvidaste o vete a saber las excusas que te pondrás,… en definitiva, no tenías valor para esa conversación. Y ahora ya nunca podrás realizarla.

Cada día creo que hemos perdido el noble arte de la conversación como bien dice Santiago Álvarez de Mon, en su libro «Las conversaciones que no tenemos. Filosofía del Encuentro». (Libro que recomiendo y esencial par estos momentos).

Una conversación es un lugar de encuentro con los demás, donde nos cambia y les cambia a los demás para siempre. ¿Qué bonito, verdad? Pero a día de hoy es algo casi imposible.

Tienes miedo a mantener una conversación con alguien que no conoces, no vaya a ser que el tema que vayas a sacar le pueda molestar o responda de forma «airada» peor que un hooligan cuando pierde su equipo de fútbol. No es al primera vez, ni tampoco será la última que oigo frases como: «Yo ya no hablo de todos los temas, no sé cómo me va a responder la otra persona. Sé que si hablo con esta persona de este tema, la tendré varios días enfadada conmigo..»

¿O no conoces a alguien así?

Vivimos unos momentos en los que no podemos hablar de todo con todos, porque estamos muy «susceptibles». Y lo único que provoca, que una conversación en vez de ser un centro de creatividad, de ideas, de generación de pensamiento crítico, de flexibilidad y de curiosidad, se acabe convirtiendo en algo «muy peligroso». Provocando que solamente hablemos con personas que tienen nuestras mismas «ideas» o que no se van a enfadar si mostramos una idea diferente a la suya.

Dícese de gente normal, como así también «gurús» que cuando rebates sus ideas con ideas, a pesar de hablar de felicidad, el amor, el buen rollo y demás, dejan de hablarte. Principalmente no vaya a ser que se den cuenta los demás, que lo que promulgan no se lo aplican a ellos mismos.

Si ya no puedo hablar con personas a las que se considera «expertas» o sabías, de las que aprender, ¿De quién aprendo?

Porque pensamos que una conversación es hablar de nosotros sin parar, no dañando nuestro ego y deseando que nos aplaudan. Cuando una verdadera conversación, no trata de eso.

Una verdadera conversación es siempre honesta, libre, sincera.. Pero a día de hoy cuando encontramos a una persona sincera, lo primero que le decimos es: «No seas tan sincero, que te puede salir más caro que beneficioso»: Y si hacemos caso, ¿Cuándo habrá una conversación sincera si nos callamos lo que pensamos o sentimos? Nunca o cuando la «mochila» de las emociones sea ya imposible de arrastrar.

En marzo se nos llenaba la boca hablando de muchas cosas, que a día de hoy, un año después, volvemos a repetir y a olvidarnos de esos buenos deseos que teníamos.

A día de hoy, somos quienes somos, gracias a la suma de muchas conversaciones que hemos tenido a lo largo de nuestra vida. Unas surgieron por azar, otras las provocamos nosotros y otras muchas, aunque al principio no quisiéramos tenerlas, transformaron nuestra vida.

Pero antes de todas ellas, las conversaciones más importantes, son las que tienes contigo mismo. Algo que también nos da miedo afrontar pero que siempre son necesarias para nuestro devenir personal o profesional.

Una conversación conmigo mismo determinó apostar por mí y mi felicidad, dejando de lado años de creencias y miedos. O decir adiós a relaciones de años que realmente solo me aportaban mentiras y no tranquilidad.

Pero esas conversaciones contigo, al igual que tienes que con los demás, tienen que ser con preguntas que solo acepten respuestas honestas, sinceras y claras. Sino no existe una conversación, un plan de futuro a implementar. Pero a día de hoy, preguntarle a la otra persona «¿Qué tal estas?», ya lo consideramos que hemos conversado con él, perdiendo muchos matices y cosas por no preguntar de una forma más atinada.

Hemos perdido el arte de conversar porque tenemos miedo a que descubran que no somos lo que promulgábamos ser. Me da igual las redes sociales, el éxito o lo que quieras, pero no nos relacionamos entre personas, nos relacionamos entre mascaras. Y es muy fácil, luego te enteras pasado el tiempo que una persona se ha suicidado, que lo está pasando mal, que le ha pasado cualquier cosa y no ha tenido el valor de contártelo a ti, a pesar de la confianza que teníais. Te preguntas, ¿Y por qué no me lo dijo?. La respuesta es fácil, quería mantener las apariencias. Y así somos.

Las redes sociales se llenaron tras el documental de Pau Dones. Todos hablando del amor, de la felicidad, del vivir. Pero me gustaría saber cuántas de esas personas, dieron un primer paso tras su visualización. Porqué para empezar a vivir no es compartir imágenes de una entrevista, para empezar a vivir, hay que tener una conversación sincera con uno mismo. Quizá las respuestas que recibas, son que estás viviendo la vida que deseas, Pero si no te gustan las respuestas que obtienes, quiere decir todo lo contrario.

Solo empezaremos a vivir cuando el timbre de nuestra voz, se oiga mucho más fuerte que el ruido del exterior. Mientras tanto, lo único que estaremos haciendo, son tonterías. Pero pasa una cosa, para mantener una conversación con nosotros mismos y luego con los demás, tenemos que hacernos amigos del silencio. Y en una sociedad llena de ruidos, de exigencias, de alarmas de móviles, el silencio es la antítesis de un estilo de vida frenético.

El silencio es el antídoto del ego, ego que domina toda conversación actualmente. Silencio que deja salir a la luz palabras que teníamos escondidas por miedo, realidades que teníamos escondidas en las cortinas «del qué dirán» o miedos que teníamos endulzados con promesas futuras.

El silencio es el catalizador de una buena conversación contigo, así como de la escucha y empatía que tanto se necesita a la hora de conversar con otra persona.

Posponemos nuestra felicidad, nuestras oportunidad para cuando vengan tiempo mejores, cuando te hayas jubilado o cuando pase todo. Esta situación nos ha dicho algo muy claramente: SOLO EXISTE EL AQUI Y EL AHORA.

Así que ten esa conversación que te da miedo tener AQUI y AHORA, si puedes realizarla. O prográmala con una cita. Pero no dejes que pase el tiempo y luego te arrepientas por no haberla tenido.

Así que ten esa conversación contigo mismo. Creo que es un ejercicio sano, saludable y gratis, que te dará las claves de lo que te pasa, de lo que no te pasa y de lo que tienes que hacer de verdad con tu vida o tus proyectos.

Así que la próxima vez que surja tener una conversación con alguien, que sea una conversación de verdad. Que sienta tu presencia en el aquí y el ahora, con preguntas atinadas, se empático.

La conversación es el motor de transformación personal y grupal. Algo que estamos perdiendo y olvidando en muchos casos.

¿Y así queremos avanzar sin poder ni siquiera conversar?

¡¡MAL VAMOS!!.

¿Qué sería de un mundo en el que todos no tuviéramos en nuestra mochila ninguna conversación pendiente?

Antoni Bolinches: «Muchas de nuestras acciones están motivadas en nuestras suposiciones.»

Hoy dentro de la sección «Conversaciones con..» es un placer presentar a Antoni Bolinches.

Cuando vemos en televisión, en redes sociales, gente que es feliz, que ha alcanzado una meta, pensamos que tiene super poderes. Cuando realmente lo único que han hecho ha sido movilizarse en contra del miedo y de la espera por la que optan la mayoría de las personas. Y más en estos momentos.

Antoni, en su nueva obra, «Tus 4 poderes: Cambia tu vida con inteligencia, voluntad, bondad y actitud positiva«, nos invita, a través del resumen de más de 40 años de actividad profesional, a activar todo nuestro potencial.

Podéis conocer más el trabajo de Antoni, uno de grandes psicólogos clínicos de nuestro país, pensador humanista a través de su Web, Instagram, Twitter y Facebook.

¿Qué poderes tiene Antoni Bolinches?
De los cuatro que considero esenciales quizá la actitud positiva y la voluntad.

¿Alguno te gustaría añadir más?
Me conformaría con desarrollar los cuatro en grado suficiente.

Soy un defensor de ir a terapia y creo que ahora más que nunca, nos estamos dando cuenta que se necesita. ¿Por qué nos cuesta tanto pedir ayuda?
Porque intuimos que todo cambio requiere un esfuerzo y preferimos lamentarnos que corregirnos.

¿Qué piensas de la gente que dice, que hay que focalizarnos en lo que se nos da mal, que hay que convertir nuestros defectos, en nuestras virtudes?
Cierto que corregir los defectos puede ser una gran virtud. Pero para mí lo fundamental es la aceptación superadora. O sea aceptarnos como somos y mejorarnos en lo posible.

Dices que podemos ser nuestro mejor maestro, ¿Pero también podemos ser nuestro peor enemigo?
Las dos cosas son ciertas y cada uno debe decidir qué parte desarrolla.

¿Por qué nos gusta tanto vivir autoengañados?
Eso solo ocurre cuando no encontramos un camino mejor. La mayoría más que autoengañados vivimos conformados ante una realidad que no sabemos como cambiar.

Creo que si se nos enseñasen a perder más, ganaríamos más en la vida, ¿Qué piensas?
Simón Bolívar decía que “el arte de ganar se aprende en las derrotas”. Pero eso no quiere decir que deban enseñarnos a perder. De hecho, lo que nos conviene es intentar hacer las cosas bien y aprender del fracaso si salen mal.

¿Qué le dirías a aquellas personas que piensan que ni el futuro ya está en sus manos?
Que confíen en sus posibilidades y podrán comprobar que siempre hay margen para influir en la propia vida.

Somos una sociedad más pragmática, queremos fórmulas para todo, ¿Dónde queda el esfuerzo?
Queda en la reserva porque es cierto que, por regla general, nos esforzamos poco.

En marzo la gente hablaba de una sociedad que iba a cambiar, ahora veo que solo eran unos parches, ya nos hemos olvidado de todo ello. ¿Cómo lo ves?
Vivimos una crisis de modelo de civilización. Las cosas están tan mal que es difícil que no podamos mejorar en algo. Por eso, creo que solo desde el mejoramiento personal será posible crear una sociedad mejor.

¿Qué es lo más importante que has aprendido de tus fracasos?
Que cada fracaso es una oportunidad de aprendizaje, pero que no hay que confundir fracasar con aprender. Para que el fracaso nos ayude hemos de sacar conclusiones positivas de las malas experiencias.

Creo que en tu libro te faltaba un poder, la creatividad tan necesaria en estos momentos. ¿Qué piensas?
Cierto, pero espero haberla utilizado al escribirlo. Bromas aparte, mi criterio es que la creatividad no es una facultad primaria general equiparable a la inteligencia, la actitud positiva, la voluntad y la bondad, sino potestativa de un determinado tipo de inteligencia.

¿Un pequeño paso es el mayor de los pasos para el ser humano?
Es una buena forma de verlo. De hecho, la suma de muchas pequeñas cosas puede dar un gran resultado.

¿Somos nuestras acciones y no, nuestras suposiciones?
Somos nuestras acciones, pero muchas de ellas están motivadas por nuestras suposiciones.

¿Cuál es el principio del comienzo para descubrir nuestros poderes?
Aceptar superadoramente nuestros defectos y limitaciones, y confiar en que todos podemos mejorarnos.

Jacobo Parages: «Pasión por vivir»

Hoy dentro de la sección  «Conversaciones con..» es un placer presentar a Jacobo Parages.

¿Qué me dirías si te dijera que Jacobo con una espondilitis anquilosante, que le obligó a dormir durante 5 años sentado por el dolor le han llevado a cruzar el estrecho de Gibraltar dos veces? ¿Qué me dirías si en el 2013, te fuera detectado un tumor maligno y aún haber cruzado el Canal de Menorca , siendo la travesía de 40km en 12 horas , siendo la primera persona que lo consigue con su enfermedad? ¿Serías capaz de unir dos continentes como Europa y Asia a nado? ¿O participar en la Copa de España en Aguas abiertas en 2018?

Pensaríamos que es imposible, que es una locura. Querríamos hundirnos al ser diagnosticados.

Sin embargo, Jacobo a través de las dificultades le han llevado a escoger el camino de la superación

A través de su dilatada experiencia profesional , con más de 25 años gestionando equipos y liderando proyectos, su misión es la de despertar y estimular el talento de los equipos y de la sociedad en general.

Es autor del libro «Lo que aprendí del dolor«. En el que nos enseña que cuando el dolor no nos deja vivir, es el momento de empezar a vivir.

Podéis conocer más el trabajo de Jacobo a través de su Web, Facebook, Twiter y LinkedIn 

¿Si fueras el título de una conferencias, cómo se llamaría?

Pasión por vivir, por ser útil a lo demás y por cumplir sueños.

.- ¿El ser humano vive o sobrevive?

Algunos solo sobreviven, otros viven y estos últimos son más felices que los anteriores.

.- ¿Ha cambiado tu concepto de felicidad? ¿Eres feliz?

Han cambiado muchas cosas.

La edad, la experiencia, la madurez, las circunstancias que te toca vivir hacen que las cosas cambien, evolucionen, no soy igual hoy que hace vente, diez o cinco años, y junto a esto también ha cambiado mi concepto de felicidad. En mis etapas anteriores mi concepto de felicidad pasaba por otras cosas, más quizá en el entorno del tener, y ahora mi felicidad pasa más en el entorno del SER.

Soy feliz en momentos concretos, pero no puedo decir que sea absolutamente feliz. Creo que nadie es plenamente feliz siempre. Hay momentos de felicidad y esos si los he tenido, los tengo y los conozco. Esos momentos de felicidad hay que recordarlos siempre porque te ayudan a recordar donde hay que volver.

.- ¿Qué pondrías en una valla publicitaria enorme si te diera la oportunidad?

Pondría una sola palabra con letras muy grandes: Sonríe

La sonrisa sincera es el idioma universal, es el puente más cercano entre dos personas, se convierte en un diálogo profundo, alivia, consuela, tranquiliza, motiva, emociona, conmueve, nos acerca a los demás y es generosa porque antepone al que la recibe sobre el que la ofrece.

.- ¿A qué tiene miedo Jacobo?

A muchas cosas, al dolor en personas queridas, a irme de este mundo y mirar atrás en el último suspiro y no estar plenamente satisfecho de que esta aventura haya valido la pena porque me haya dejado cosas en el camino. No nos arrepentimos de aquello que no hemos conseguido, si no de aquello que no nos hemos atrevido a intentar hacer.

.- ¿El único propósito que tiene la vida es darse a los demás?

Darse a los demás, ser útil a otras personas es quizá el propósito más importante que un Ser Humano pueda tener en su vida, pero no el único. Hay otros como encontrar nuestro equilibrio espiritual, seguir emocionándonos con las cosas pequeñas de la vida, seguir logrando retos y poder compartirlos, entender el sentido de la vida, alcanzar la felicidad.

.- ¿Qué quieres ser de mayor?

No quiero ser mayor.

.- ¿Cuál debe ser el principio del comienzo para alcanzar un objetivo?

El principio del comienzo para alcanzar un objetivo es tener ese objetivo, y cuando lo tienes hacerlo tuyo y comprometerte hasta el final con él. A partir de ahí, estar dispuesto a dar lo que tengas que dar para lograrlo, sin excusas y gestionando las dificultades que se presenten en el camino para alcanzarlo.

.- ¿A veces has tenido ganas de tirar la toalla?

Si. No soy una maquina y mis emociones también me han puesto la zancadilla en algunas ocasiones. En distintos momentos he pensado que no puedo más y que quizá debería parar. En el camino siempre hay momentos de duda, incertidumbre, cansancio o incluso miedo que te llevan a la idea de abandonar, y cuando eso te pasa hay que volver al origen, a la razón que te llevó a tomar la decisión de emprender ese camino, al propósito real que te ha llevado ahí. Si tienes clara la razón que un día te llevo a asumir ese reto, difícilmente abandonas cuando te llegan las dudas o las ganas de tirar la toalla.

.- ¿Cuánto hijo puta es la mente?

La mente puede ser nuestro principal enemigo, pero también se puede convertir en nuestro principal aliado y fuente de motivación. Depende de nosotros si escuchamos a nuestro “boicoteador personal” o nos centramos en nuestras creencias empoderantes y crecemos desde ellas. Tenemos la libertad de elegir nuestra actitud ante las circunstancias en la vida y eso es siempre una buena noticia. Es vital gestionar bien nuestro diálogo interior y a veces somos excesivamente duros con nosotros mismos desde lo que pensamos. A la mente también se la tiene que cuidar y se la puede entrenar.

.- ¿Cuál es tu consejo a la hora de afrontar una adversidad?

Creo que es importante intentar buscar la respuesta al para qué y no tanto al por qué de tener que atravesar la adversidad. Hay una frase en la que creo profundamente y que me encanta compartir: La adversidad prepara a las personas para destinos extraordinarios. A la hora de afrontar la adversidad tenemos que empezar por entender que ésta tiene que servir para algo y a partir de ahí, con calma, con paciencia, y sobre todo con actitud positiva, afrontar lo que haya que afrontar para salir de ella. “Ningún mar en calma hizo a un experto marinero”.

.- ¿Qué seriamos sin retos en la vida? ¿Y sin curiosidad?

Sin retos seríamos seres dormidos, sin pasión, sin la gasolina que nos hace disfrutar, sacrificarnos, luchar, celebrar, compartir, reír, llorar, emocionarnos, crecer.

Sin curiosidad, como especie no habríamos evolucionado lo que lo hemos evolucionado y seguiríamos en la edad de piedra. Como personas es un poco lo mismo, la curiosidad nos mete en mundos nuevos, nos empuja a aceptar retos distintos a despertar habilidades y nos ayudan a crecer y a evolucionar.

.- ¿Podemos llegar a vivir dos veces dentro de una misma vida?

Creo que podemos llegar a vivir más de una vez dentro de una misma vida. Aunque formen parte de tu única vida, segundas oportunidades te llevan a vivir una vida distinta de la anterior.

Cada etapa vital nos lleva a una vida distinta en la que aprendemos, experimentamos, logramos cosas distintas y nos relacionamos con personas diversas. Es como vivir distintos capítulos dentro de la única historia de nuestra vida.

.- ¿Qué has aprendido de los mejores que nunca olvidas?

Hay muchas personas de las que he aprendido muchas cosas. Algunas de esas personas son públicas, otras anónimas y muy cercanas a mí. De ellos, mis referentes, he aprendido que hay menos límites de lo que creemos, que es importante entender el significado del esfuerzo, la coherencia, el sacrificio, el compartir, el vivir apasionadamente, el compromiso con los demás, el verdadero significado de generosidad, la capacidad de aceptar una mala noticia con la cabeza alta, el ser humilde ante el fracaso y sobre todo en el éxito.

También he aprendido que la personas que más mérito tienen son las que logran algo por primera vez y demuestran al resto de seres humanos que eso era posible, y esas personas tienen un lugar especial en mí.

.- ¿En realidad, qué es lo importa de verdad?

Hay una frase de Winston Churchill que responde perfectamente a esta pregunta: “El problema de nuestra época es que la gente no quiere ser útil si no importante”. Creo que lo interesante de verdad es ser útil a los demás, desde nuestros éxitos, con nuestros fracasos, desde el cumplimiento de nuestros sueños compartidos o gestionando nuestros miedos o incertidumbres.

¿No es mucho mejor ser útil a otras personas que sentirte importante hacia ellas? Ser útil a otras personas le da sentido a lo que haces, sentirte importante hacia los otros te lleva al terreno de la vanidad y la arrogancia.

Anni B.Sweet:» Todos los días tenemos un nuevo universo por estrenar».

Hoy dentro de la sección «Conversaciones con…» es un autentico placer para mí presentar a Anni B.Sweet.

De pequeño no me gustaban mucho las lentejas, ahora de mayor, les tenía un poco más de consideración, pero ellas, las lentejas,  fueron las culpables de que terminara una de las conversaciones más inspiradoras hasta la fecha. Una conversación que nos estaba llevando a descubrir que a veces como buenos astronautas nos quedamos solos con la luna, descubriendo que la vida está en otra parte.

Ana Fabiola Lopez, más conocida como Anni B.Sweet,  es una de las cantantes femeninas de referencia en nuestro país a nivel  nacional e internacional.

Actualmente se encuentra de gira por nuestro país, para posteriormente llevarla por toda Europa, presentando su 4º trabajo «Universo por estrenar«, cosechando éxitos de critica y público allá donde va.

Nunca hago ninguna recomendación. Pero antes de empezar a leer la conversación que mantuve con ella con motivo de su próximo concierto en mi ciudad, poneros una copa de vino o con lo que disfrutéis, obteniendo una de las experiencias más sublimes hasta la fecha con una entrevista que demuestra sencillez, humildad, creatividad e innovación así con una banda sonora de fondo, que os dejará con las ganas de descubrir que todos los días tenemos la oportunidad de descubrir un nuevo universo.

Podéis conocer más el trabajo de Anni, a través de Twitter, Facebook, Instagram y Spotify.

.- La gente cuando vamos a un concierto, vemos al artista encima del escenario, ¿Pero qué no vemos? ¿Qué hay detrás de ese momento?

Hay mucho esfuerzo. Hay muy poco de estar en casa. Hay mucho de ver a la familia, a los amigos. Algo que se suple mucho con ir a un concierto y ver a la gente disfrutando con lo que estás haciendo.

Te pegas mucho tiempo fuera de tu casa. Hay muchos costes que la gente no ve. Es algo que haces muy feliz, ya que es un nuevo disco que haces con la ilusión del mundo. Teniendo en cada concierto la recompensa de la gente, que es mucho más grande que la económica.

Ver que la gente se sabe las canciones, me llena muchísimo. Y aunque me pegue un mes fuera de casa, cuando ocurren cosas así, merece la pena todo este esfuerzo. Ya que también hay muchos momentos de incertidumbre, de dudas en los que no sabes si la gente entenderá lo que estás creando. Pero todo lo que estamos cosechando, está valiendo la pena.

.- ¿Cómo se lleva una artista con la incertidumbre de la reacción del público?

Todo tiene mucho que ver con la energía que se crea en la sala y con el público. Yo soy ese tipo de personas que antes de subirse al escenario me siento muy insegura. Pero en el momento de entrar en el escenario, si siento que hay respuesta, yo me siento muy a gusto. Pero si siento que esa sensación de fluidez no ocurre, si que hay momentos de tensión durante el concierto.

Cuando eso ocurre, me creo mi propia burbuja en la que intento disfrutarlo yo, la banda y la gente que si quiere disfrutar del concierto.

Si hay buena energía, yo me relajo . Pero sobre todo trabajando mucho, para no ser tan sensible a ello. Ya que pienso que hay que controlarlas, sino estaría pasándolo muy mal siempre.

.- ¿Qué le diria la Ana actual, a la Ana de hace 10 años?

La verdad que es muy complicado. Pero le diria que no sea tan inocente en algunos aspectos. Pero la verdad es que también me ha servido ser inocente también.

Realmente le diria todo o no le diria nada. Le diria que no sufriera por algunos errores, pero también no le diria nada , para que pasase por ella misma por esas situaciones que nos han llevado a donde estamos hoy.

Pero te digo una cosa, la Ana de antes, no creo que le haría ningún caso a la Ana de ahora. A lo mejor se rayaría un tiempo, pero haría lo que sintiese ese momento.

.- ¿Qué consejo te han dado que jamás darías a otra persona?

Sobre todo cuando me han dicho que intente actuar de alguna manera.

Entiendo que me digan que me lo tengo que creer cuando salga al escenario. Es un consejo que entiendo por donde va, echada para adelante… Pero a la vez no me parece muy bueno, porque justo en ese momento, creo que hay que ser uno mismo , más que nunca.

Eso de convertirte en alguien que no eres , está bien si es a lo que aspiras.  Pero me hubiera gustado más que me hubieran dicho que no me preocupase, que no pasaba nada, que fuera yo misma…

Normalicemos nuestra forma de ser, no la angustiemos.

.- ¿Cuál sería la mejor inversión que una persona con 100 euros podría hacer?

Si te soy sincera, lo que me ha venido a la mente ha sido una fundación de animales que los recoge. Y los otros 50 euros, sería a organizaciones que ayudan al ser humano.

.- ¿Y qué pondrías en una valla publicitaria enorme?

Es algo que me mola mucho. Ya que es algo importante que hablaría con mis amigos. Siempre daría un mensaje de paz,  de menos violencia,de relajarnos, de ser mejores personas y de estar en consonancia con la tierra.

Pero me tendría que currarme la frase, ya que aunque hay millones de frases, parece que aún no se han entendido el mensaje de las mismas por lo que vemos en la actualidad.

Un país sin violencia creo que sería un país mucho más culto.

.- ¿Todos los días tenemos un nuevo universo por estrenar?

Si, la verdad que no lo había pensando nunca. Todos los días es un día nuevo. Y si quieres puede ser un universo por estrenar, que abrir o seguir construyendo el tuyo si es con el que te sientes a gusto.

.- ¿Cuál es el libro que más has regalado?

«Los renglones torcidos de Dios» de Torcuato luca de tena y «Clases de Literatura» de Julio Cortázar , que últimamente lo estoy regalando un montón. Si un libro me mete en una situación y de repente salen dudas, con un final diferente al que creías, son los que me gustan mucho.

.- ¿Y Ana como ve la realidad?

La verdad David, que me pillas en un momento «no positiva» por las cosas que se están viviendo alrededor. A mi me influye un montón con lo que sucede a mi alrededor, siendo muy fácil que sea engullida por la oscuridad. Pero también hay que reseñar que hay es cuando salen las ganas de escribir, las canciones, para darles un punto positivo a esa situación.

Veo la realidad muy dividida. Un momento muy bonito con todo lo que estoy viviendo con el disco. Pero por otro lado los momentos que estamos viviendo, lo que rodea no lo veo tan positivo. Haciendo que no disfruto al 100% de todo.

También estoy en un momento que estudio esas sensaciones y sacar la positividad de esos momentos de oscuridad. Una cosa trae a la otra.

.- ¿Qué es la felicidad?

Yo creo que la felicidad, es la tranquilidad, es la calma. El estar tranquilo es lo más parecido a la felicidad, al menos para mí.

Luego hay momento de felicidad con niveles más altos, con un concierto ha salido genial o te aplauden, pero no dura tanto como la calma.

Y ocurre con el resto, lo veo un lugar interesante para indagar. La felicidad me ciega, te sientes feliz. Pero cuando no ocurre, esos otros sentimientos son interesantes, para indagar, para ver cosas muy bonitas. En los momentos de melancolía encuentro más esencia. Y no estoy hablando de estar todos los días llorando.

.- ¿Qué quieres ser de mayor?

No me veo de mayor. No me veo. Lo pienso , pero no me imagino.  Pero si pudiese elegir me gustaría seguir tocando, tener mi propio estudio y ayudar a producir. Darle toques a canciones que creo necesarios. Que contasen conmigo para hacer bandas sonoras de películas…  Me gustaría hacer tantas cosas..

.- ¿Como es el proceso creativo de una canción?

Hay diferentes formas, porque no siempre me sale igual. Puedo estar hoy cocinando unas lentejas mientras hablo contigo, como de repente me venga una melodía que me guste mucho. Pero hay otras veces que tengo una conversación con alguien, una pelicula o un libros, me viene una frase a la cabeza o algo que me ha gustado y a partir de ahi empiezo a tirar del hilo. Y de ahí le busco una melodía, algo totalmente diferente a lo que te comentaba antes.

Aunque también hay veces que me apetece tocar, sale algo y a partir de ahí , empiezo a estirar del hilo. Tengo diferentes maneras de crear.

Cuando he tenido momentos de bloqueo e intentado ir a alguna de estas formas y no salía nada. La verdad que ni yo se cómo la inspiración viene a mí a la hora de componer una canción.

No hay nada prediseñado. Y la verdad que es la parte bonita de todo esto.

.- Una reflexión para los lectores del portal.

Conversemos más sobre este tipo de cosas que hemos estado hablando todo este rato y que la verdad que hacía tiempo no hablaba, aún siendo yo de estos terrenos.

Hablemos más, profundicemos más en alto. Exterioricemos más las profundidades.

 

Santiago Álvarez de Mon: «El pensamiento tiene que ser propio y critico…»

Hoy dentro de la sección «Conversaciones con..» para mí es un placer, presentar a Santiago Álvarez de Mon.

Todos que estamos leyendo esta entrevista, hemos recibido en algún momento de la vida o lo estamos recibiendo, la visita de la adversidad. Queramos o no , la vida está formada por dos orillas, la incertidumbre, la adversidad, y la falsa seguridad.

La adversidad nos enseña las actitudes pusilánimes, la debilidad que nos domina ante los momentos cruciales de nuestra vida e inesperados. La adversidad nos enseña el carácter que tenemos . Y es el carácter, y no la inteligencia quien nos llevará al éxito o al fracaso ante dicha situación

Hay gente normal que en momentos excepcionales nos han demostrado alcanzar metas que para nosotros pensaríamos cómo algo imposible. Es el carácter quién lo ha llevado, acompañada de la gallardía y la perseverancia.

Santiago Álvarez de Mon, referencia en el mundo del Management nacional e internacional, coach, profesor en IESE, es autor de uno de los libros más importantes en el desarrollo personal e imprescindible en toda biblioteca, como es «Desde la adversidad . Liderazgo, cuestión de carácter«. Un libro que te ayudará a encontrar tu mejor destino.

.- ¿Por qué a la primera persona del singular, la denominamos egoísmo?

Porque tenemos una visión muy superficial y epidémica de esa primera persona del singular. Todo ocurre en esa persona del singular.

Del yo profundo, eterno,  intemporal del ser humano puedes ir al ego más estúpido y narcisista. O puedes llegar a la comunidad más generosa y complementaria

A nosotros se llega recorriendo los misterios del Yo. Somos seres y animales sociales.

Si confiamos en el misterio y la singularidad del yo, lo que te encuentras es una multitud aborregada, una masa que diría Ortega

.- El consenso, ¿Siempre es una idea equivocada?

No lo sé, pero si es sospechosa. Si las dos partes piensan de la misma manera, seguramente que una de las dos partes no piense.

No se  quien dijo, que nacemos originales, pero morimos fotocopias.

Yo creo que el pensamiento tiene que ser propio y critico, con errores y con aciertos. No se trata de si estoy acertado o no, sino se trata de aprender.

Y para aprender tienes que gestionar soledades, ejercitar deberes…Es una aventura que tiene que ver con la comunidad, con el otro. Con el que marcha a tu lado, como diría Machado. Pero siempre desde el cercano singular de cada hombre y mujer, que no puede ser fotocopiado.

.- ¿Por qué se estudia tanto el mundo del liderazgo? ¿Por qué no hay una definición de líder establecida?

Celebro más hablar de liderazgo que hablar de líder.

El liderazgo es la transformación de la realidad, que puede estar en unas manos y cambiar a otras.

A mi me gustan las sociedad en las que no conozco el nombre del Primer Ministro. A mi me da miedo los lideres carismáticos que tienen devoción a perpetuarse. Cuando la sociedad depende de aquel con carisma que viene a salvar a la patria, en esas sociedades del liderazgo al totalitarismo media un paso.

Me gusta más hablar de personas, de profesionales, de ciudadanos comprometidos que en función de la temática ejercen el liderazgo de una manera temporal.

Yo no busco la definición perfecta del liderazgo. Sino que estudio en el proceso en el cual unos influyen en los comportamientos, actitudes de los demás. Ya que un padre influya en el comportamiento de un hijo no significa que perpetúe ese estilo con un hijo que aspira la madurez y a volar en libertad.

Siempre creo que una de las ultimas funciones del líder, es crear una cantera fértil de lideres y que el día después no de miedo, que no asuste, sin que la depresión y el vacío le asole.

Pero como las marcas que dejan huella, los grandes lideres son atemporales y universales. Si lees a los grandes clásicos, hay algo intemporal y universal que cose misteriosamente la humanidad.

El liderazgo que creo pulsa, provoca, inspira, despierta esa mejor versión del ser humano, en una personalidad dual. Es fácil despertar a la violencia, pero me parece mejor en el liderazgo vencer al miedo, gestionar conflictos y alumbrar un mundo mejor ,siempre dentro de las limitaciones y condiciones humanas.

Y es algo universal, desde Abraham Lincon, Gandhi o Nelson Mandela. Es el viaje del Yo al Nosotros. Es un viaje por ejemplo que le permite a Mandela empatizar con su carcelero o nunca recurrir a la violencia.

.- ¿Te has preguntado alguna vez por qué haces lo que haces?

Me lo pregunte en el momento en el que me surgió la oportunidad de dedicarme a la docencia. Estaba en una empresa multinacional y de repente me hice una pregunta: ¿Qué hacia yo aquí?. Luego me pregunté: ¿Qué vas a hacer si te vas?. Eché la vista atrás a ese seminario gratis que es la vida de cada uno.

Y en la búsqueda del quien no soy al paso del quien soy, descubrí que mis experiencias anteriores en docencia era lo que me gustaba. Podré estar más cansado, tener más pereza, me saldrá una clase mejor que la otra, pero hay una parte importante de mi ser, que tiene que ver con ser profesor.

Con la opción de profesor, también había otra que era la de escribir. Escribo casos, escribo libros, escribo artículos. Y luego tenemos la de asesor de equipos, de coaching, Permitiéndome esta tercera via, acompañar a gente en su experiencia vital, escucharles, motivarle y que saquen su potencial. Se trata de ayudarle a ellos, a animarles que saquen quienes están llamados a ser.

Soy muy lúdico, tengo un gran sentido del placer, me encanta lo que hago. Tengo la misma curiosidad que cuando empecé. Es un lujo aprender de  gente que sabe más que tú. Y que te paguen por lo que hago, es una autentica dicha.

Lo mejor de mi trabajo es la suerte que tengo del número de personas que tengo el placer de conocer.

.- ¿Todo éxito empieza o termina en la cabeza, con los pensamientos?

No. El pensamiento siempre es la antesala de algo más. Einstein decía que la imaginación es la cumbre del pensamiento.

Tenemos que pensar. Y si no piensas, eres un frívolo, un talibán, un vago. Pero si solo piensas, sospechas. El pensamiento trabaja , prueba. Evidentemente hay que estudiar, hay que conocer, analizar… SI fuéramos conscientes de todo lo que hacemos, no lo haríamos.

Muchos de mis clientes, les he preguntado por el origen de su trayectoria. Y muchos te contestan que lo hicieron porque no eran conscientes de su ignorancia. Hay una parte de sabiduría en la ignorancia. También hay una ignorancia estúpida que hay que ignorar.

Esa parte ignorancia sabia, te hace soñar, que como decía Unamuno, era vivir.

Con muchos deportistas con los que trabajo, esos toques que tienen, los hacen porque no los piensan. Pero para llegar ahí, si el pensamiento no pesa, tienes que repetir mucho, para jugar en piloto automático.

.- ¿Qué poder tiene una conversación?

La conversación siempre tiene que ser el encuentro de dos almas. Un encuentro que debe respirar, que debe fluir y no una batalla de egos con el fin de ganar la misma.  Sino sería un monologo y no una conversación.

Una conversación te tiene que sacar de ti mismo e ir al encuentro del otro. Es ponerse en el lugar del otro, esa es la magia de la empatía que ocurre en una conversación. Produciéndose una sinergia que te hace darte cuenta que somos parte de algo mucho más grande. Somos seres sociales.

.- ¿Por qué tenemos que escuchar nuestras tripas?

Hay una parte intuitiva que escapa a la métrica. No podemos eliminar eso del viaje humano. Si así fuera, estaríamos eliminando la magia, la intuición, lo que escapa a la lógica cartesiana.

Un día si y otro también, nos comportamos de manera irracional. Por lo tanto no podemos decir que el ser humano es racional.

Hay que usar la razón, pero también hay que escuchar al corazón. La vida se escribe hacia adelante, pero se entiende hacia atrás.

.- ¿Como te sentirías si recibieras una carta de una persona que hubieras ayudado, con un GRACIAS?

Abrumado y agradecido.

No hay palabras del vocablo español que pronunciamos poco y una de ellas es gracias. Es de bien nacido ser agradecido.

Cuando das las gracias a alguien, te sientes bien. Si esperas el agradecimiento, no te llena lo que tendría que llenarte, porque es lo que esperabas. El agradecimiento tiene que sorprender. Y no debes hacer las cosas para obtenerlo.

Cuando recibes un agradecimiento constatas, la parte sublime del ser humano que es extraordinario.

La otra palabra es Pedir perdon. Perdon no de una manera culpabilizante.

Perdon, gracias y por favor, es un homenaje a nuestra condición más cívica.

.- ¿Si te dieran la posibilidad de poner algo en una valla publicitaria?

El camino es la meta.

Estamos en una sociedad llena de metas que sufre por su consecución. Pensando en el mañana se les escapa lo único que es cierto, que es el presente. Y si consiguen las metas, el gozo les dura 5 minutos ya que piensan en la siguiente.

Céntrate y dirige tu mirada en el camino. Donde hay un mundo lleno de posibilidades. El presente es el único tiempo real.

.- Para mi «Desde la Adversidad» es el mejor libro que he leído. ¿Tendríamos que darle más las gracias a esos momentos de incertidumbre?

No sé si darle las gracias , pero es que tú no puedes vivir peleado con la realidad.

Tú y yo nos podemos poner a jugar al póker y hay unas reglas de juego. Pues con la vida pasa lo mismo, es una partida. Y tienes que saber jugar con las cartas que te han tocado. No tiene sentido pelearte contra tus genes, con tu pasado.

Aprende del pasado y así irá más ligero de equipaje.

La vida es incierta. Invierte en tus recursos y así sabrás navegar por ella. Trabaja tu confianza, tu autoestima, rodéate de buena gente,  La vida tiene dos orillas, una es la pregunta y la otra es la respuesta. La compañía, la soledad,… No podemos cambiar las reglas de juego.

Aprendamos a navegar en vez de ofrecerles algo que no existe. Existe la seguridad para gobernar en la inseguridad.

Desarrolla la curiosidad como tienen la característica de los grandes. No podrás cambiar tus circunstancias pero si tus respuestas, como bien decía Victor Frankl.

El futuro es un tiempo misterioso a conquistar desde el presente, ya que es lo único real que tenemos.

La realidad es incierta y adversa.

.- ¿No lideramos nuestras vidas porque liderar tiene un precio?

Igual no lideramos nuestras vidas porque queremos liderar la vida de los demás. ¿Por qué no nos conformamos a liderar nuestra vida y a ser nosotros mismos? ¿Por qué no nos atrevemos a recorrer nuestra ruta ?

Empeñados en descubrir quienes somos, en tener una vida amable acabarás influyendo en los demás. Es una paradoja, pero quien no pretende influir es quién acaba influyendo

Margarita Álvarez: «La felicidad que hoy está de moda es una banalización…»

Hoy dentro de la Sección «Conversaciones con…» es un placer presentar a Margarita Álvarez.

Una persona que en su libro «Deconstruyendo la felicidad. Cómo mezclar los ingredientes para una vida feliz«, en sus principios dice que » Huyo de la idea que la felicidad, es una obligación, incluso un derecho«, al menos a mí ya me tenía ganado.

Buscamos la felicidad, ¿Pero que c*** es ser feliz?

De pequeños poníamos fotos de nuestras vigilantes de la playa o de nuestro grupo favorito, con la madurez, ponemos frases de Paulo Coelho para que los demás vean que somos muy felices.

La felicidad ya cansa. Haz una prueba, pregúntale durante todo un día a las personas con las que te encuentres, ¿Eres feliz? Y seguro que te dirán que si muchos de ellos. Pero cuando les preguntes ¿Sabrías definirme qué es la felicidad? La gran mayoría se encogerán de hombros e intentando escabullirse de tu presencia no vayas a hacerle otra pregunta, que les haga pensar.

Y tenía ganas de hablar con Margarita. Fue presidenta del Instituto de Coca-Cola de la Felicidad durante 4 años y más de una década estudiando la felicidad. Fue nombrada por la revista Forbes una de las 50 mujeres más poderosas de España y siempre está entre las 100 más influyentes de la Península Ibérica.

Una persona que para encontrar la felicidad, no hay que seguir reglas ni pautas, ya es algo diferente en un mundo en los que abundan los «7 pasos para ser feliz» o las formaciones para crear «Departamentos de la felicidad» en las empresas.

Al igual que a la escritora, no estoy de acuerdo con la definición de Eduard Punset sobre la felicidad, «La ausencia de miedos». Siempre tendremos miedos, y una vida sin miedos es una vida inconsciente.

Siempre que me han preguntado qué era la felicidad, para mí, siempre he respondido lo mismo «Dormir todas las noches a pierna suelta. Eso significa que has hecho todo lo que sabías que tenías que hacer en tu día».

¿Y para ti qué es la felicidad?

Podéis conocer más el trabajo de Margarita, a través de su Twitter y LinkedIn

¿Se considera Margarita una persona feliz? ¿Por qué?

Me considero una persona razonablemente feliz. Porque he nacido en la cara buena del mundo, porque cada día abro el grifo y sale agua caliente, porque tengo unos niños que si los hubiera pedido por encargo no me gustarían más, porque tengo amigos y familia que siempre están ahí. Porque he conseguido disfrutar de cada cosa que he hecho en la vida. Porque creo que las cosas que pasan, no ocurren para mejor, pero creo que hay personas que sacan lo mejor de las cosas que ocurren. Y yo soy una de ellas.

¿Por qué ahora la moda de la felicidad? ¿La felicidad es vivir en un mundo Mr.Wonderful y lleno de frases de Paulo Coelho?

La felicidad que está hoy de moda es una banalización. La hemos confundido, entre otras cosas con la alegría. Pero la felicidad de verdad, ésa lleva de moda más de 25 siglos. Aristóteles decía que la felicidad es el objetivo prioritario del ser humano. ¿Hay algo más importante que eso?

¿Debería haber tantas definiciones de felicidad como personas hay en el mundo?

De hecho es así. Nunca he escuchado dos definiciones iguales. Cada uno tenemos la nuestra porque cada uno entendemos y sentimos la felicidad de una manera diferente. Eso es lo que lo convierte en un concepto tan complejo y tan mágico a la vez.

¿Qué determinaría una radiografía de la felicidad a la sociedad actual?

La sociedad española siempre ha puntuado en un notable, notable alto. Nuestro carácter latino y nuestra parte social ayudan mucho.

¿Al trabajo hay que ir ya motivado y feliz?

Yo sí. Lo único que pido es que nadie me desmotive o me reste. Pero eso no siempre es así.

¿A veces es mejor tener poca memoria para ser más feliz con la que está cayendo en el mundo?

Olvidarse de los problemas del mundo o de los propios no es la solución. Ayuda más el luchar por arreglar las cosas para mantenerse en unos niveles de felicidad razonable.

El mayor enemigo para desarrollar y alcanzar eso que llamamos felicidad, ¿Somos nosotros mismos?

Muchas veces sí. No diría que siempre, pero casi siempre. Por estadística, a todos nos pasan cosas malas en la vida. La diferencia está en cómo las afrontamos. Insisto, casi siempre. Tener las necesidades básicas cubiertas es fundamental para construir sobre ello.

¿Cuál es el principio del comienzo de todo camino hacia la felicidad?

La intencionalidad. Hay que querer serlo. Ser negativo y quedarse en la queja y en que todo es culpa de otros es más fácil.

¿El dinero da realmente la felicidad?

Numerosos estudios demuestran que no. Así que la teoría dice que no. Estoy deseando poder asegurarlo en la práctica J

Para que los demás vean que somos felices, ¿Hasta que somos capaces de hacer en esta sociedad del postureo?

Cosas increíbles. Hay cosas que dan risa. Otras que son trágicas.

Se habla mucho en el mundo empresarial y en el desarrollo personal, el tener un propósito vital. ¿Es imprescindible para alcanzar la felicidad?

Ayuda mucho, porque supone saber que lo que haces tiene un sentido que va más allá de la tarea. Para mí hay una pregunta fundamental para entender si una persona disfruta o es feliz con lo que haces. Se sabe enseguida cuando preguntas: ¿A qué te dedicas?

¿Seriamos más felices si fuéramos más agradecidos?

Es una de las claves más importantes. Cuando le damos las gracias a alguien suceden dos cosas: la primera, es que generamos un impacto enorme en la persona a quien le agradecemos; la segunda es que ser agradecidos nos hace ser conscientes de la cantidad de cosas que nos ocurren cada día que ocurren por lo que hacen otras personas o por circunstancias de la vida.

¿La vida es dar y  no exigir la compensación por obligación?

La vida es dar. Y lo bueno de dar está en el propio hecho, no en la recompensa. Hace años se hizo un estudio en niños sobre qué les hacía disfrutar más, si hacer un regalo o recibirlo. Y la conclusión era clara. EL regalar, dar o tener un gesto altruista tiene un efecto enorme en la felicidad de la persona que lo realiza.

¿Cuándo consideras que eres una persona feliz?

Ojala funcionará así. Ojalá te pudieras declarar soltero, casado o feliz. Ser feliz es estar razonablemente satisfecho con la vida. Y eso no es un estado definitivo, es una satisfacción razonable con la vida que llevamos. Es compatible con la tristeza, los momentos malo y las circunstancias adversas que todos vivimos en la vida.

Un experto en felicidad, ¿Siempre está feliz?

Conozco algunos  y no. Sería como pensar que un médico no puede enfermar. Pero en mi caso, siempre me he considerado razonablemente feliz. Y espero seguir siéndolo mucho tiempo.

La felicidad en definitiva, ¿Es ser uno mismo?

No sé si hay otra opción…

¿Qué pondrías en una valla publicitaria si pudieras?

Piensa en qué quieres contagiarle a la próxima persona con al que te cruces…

Juan del Val: «Desea».

Hoy dentro de la sección «Conversaciones con...» es un placer presentar a Juan del Val. 

Haz un pequeño ejercicio. Pon en el famoso buscador de Internet, el nombre de Juan del Val. ¿Ya? Ahora dime que es lo primero que sale. ¿Controversia, verdad?

Hablar de Juan es pensar al instante en el escandalo como diría Raphael. Para mí, que hace unos días tuve el placer de conversar con él, con motivo de la presentación de su libro al que le otorgaron el premio Primavera de Novela 2019, «Candela«.

Al igual que en su libro, nos encontramos ante una de las entrevista con la veracidad más descarnada y con un sentido del humor desternillante, al igual que fue poder tener unos minutos junto a él.

Podéis conocer más del trabajo de Juan a través de Twitter e Instagram.

.- ¿Cómo definiría Candela (protagonista de su libro) a Juan?

Como alguien que no huye, en general. Y una persona que vive de observar y de dudar.

Y como dicen algunas personas cuando me ven, el guapucho o el feucho, pero eso ya son cosas menores.

.- ¿Como me definirías a la mujer?

Lo único que te puedo decir David, es que las hay diferentes. Generalizar es un absurdo. Yo hablo desde la fascinación sobre ellas. También es verdad que hay algunas que son exactamente iguales que los hombres de idiotas.

¿Cómo las definiría? Te diría que a quién, porque me parecería injusto generalizar. Te repito que me fascina la mujer, pero también te digo que algunas no.

.- ¿Qué conversación cambió tu vida que se realizó en un bar?

Yo creo que varias, pero hay una definitiva que fue cuando yo en un bar entrevisté a Nuria Roca. Y desde ese momento, cambió mi vida para mejor.

Aquella conversación la recordaré toda mi vida. Yo estuve muy pesado pero aún así le gusté. Una conversación que cambió mi vida de forma definitiva.

.- ¿Cuándo fue la última vez que te reíste de ti mismo?

Esta mañana. Yo me rio de mi mismo, todo el rato.

Yo que digo que tengo 50 años, te salen pelos donde no deben. Entonces me miro y me descojono.

Es una de las cosas de las que vivo, de reirme de las cosas. Deje de observarlas y empecé a reirme de mi mismo.

.- ¿En qué crees y los demás piensan que es una locura?

En la locura. Yo creo en la locura muchísimo.

La locura tampoco la mitifico, porque en general es mala. Yo creo mucho en lo que no se ve, pero por ejemplo soy un ateo absolutamente convencido.

.- Nos rasgamos las vestiduras con las controversias, ¿Qué piensas sobre cómo actúa la sociedad al respecto?

Creo que estamos en una sociedad absolutamente hipócrita.

Yo creo que la gente pública y sobre todo los autores, tenemos algunas obligaciones, que no muchas. No creo que debamos dogmatizar sobre nada ni tampoco tener verdades absolutas pero sí creo que debemos ser un poco polémicos. Es una obligación el provocar.

Ya que estamos demasiado acostumbrados a lo políticamente correcto y a lo conveniente sobre todo. A decir las cosas que son convenientes. Provocar es algo que me interesa y me gusta. No es que me interesa porque me interese sacar un beneficio.

Las polémicas que hemos vivido siempre han sido forzadas. Ya que nunca ha habido polémica. Nosotros lo único que dijimos es que hay 1.000 opciones. Y también dijimos que hay diferentes planteamientos, como la pareja tradicional a la vista está que no funciona. Y si no funciona quizá hay que abrir otros caminos, pero que sobre todo cada uno, haga lo que quiera.

La polémica es ficticia porque tiene que ver con los medios de comunicación, con la necesidad de hacer titulares grandilocuentes para que alguien haga click y nada más.

Los que hacen ruido son los imbéciles en líneas generales. Parece que hay más, pero simplemente es que hacen más ruido.  Los que se manifiestan de forma negativa para satisfacer alguna carencia que tienen o es el miedo. El miedo es algo muy jodido.

Parecía que la infidelidad la habíamos inventado Nuria y yo. Y es algo que está en todos los lados.

Pero lo que quería decirte es que los imbéciles hacen ruido, es una de sus características.

.- De tu pasado, ¿A qué das gracias?

Esto suena muy cursi, pero yo soy producto del amor. A mi me han querido muchísimo y muy bien durante todo el tiempo.

Claro que se han equivocado, mis padres…pero me han querido tanto. Soy un tipo con mucha suerte, ya que tengo una familia que me ha querido mucho, que me da armas, sentido del humor. Y luego durante mi vida me he tropezado, con cierta habilidad para huir de los indeseables pero cuando me los he cruzado tampoco me han hecho un daño importante.

Tengo mucha suerte, soy producto del amor. Estoy encantando con mi vida. No he tenido un pasado complaciente, pero mucha suerte con la gente.

.- ¿La fama emborracha?

Pregúntale a otro, porque yo la verdad no.

Y esas personas a los que la fama les afecta, ya estaban de antes, tocaditos.

La fama le cambia más a quien no la tiene en relación a uno que sí la tiene. No es que digas que una persona está distinta porque tiene fama, es que le estás envidiando.

Yo no soy famoso, me conocen alguna gente por lo que hago o porque soy el marido de Nuria Roca, que ya es como si fuera mi nombre, mi etiqueta, del que estoy completamente encantado.

Hay famas que debe ser insoportables, como aquellas a las que les sigue los periodistas. Pero si entro en un bar y hay 100 personas, en el cual me conocen 35, pues «hola, ¿Qué tal?».

En general, yo creo que hay una cosa bastante desprestigiada, que es la naturalidad. Hay mucho famoso que se toma muy en serio.

Que te reconozcan por la calle, no es algo importante. Los famosos sobre actúan que te cagas.  Muchas fotos que te hacen, no salen.

.- ¿Cuánto tipo de miradas hay en la vida?

La educación tambien mola. Si yo miro donde quiero mirar, en algún momento puedo intimidar. Por eso la mirada, tiene que tener algo de educación.

Si fuéramos totalmente honestos cuando miras que cuando hablas, el mundo sería un infierno. Yo no puedo estar diciendo todo el rato lo que pienso, por eso reivindico la mentira. Hay que mentir, es una obviedad.  Yo te miro a los ojos cuando en realidad me gustaría mirarte el culo, porque creo que es un rasgo de educación.

La persona que exponga siempre que dice lo que piensa, me parece un imbécil, porque eso no puede ser.

.- ¿Tu última mentira piadosa?

A alguien que le he dicho que algo era gracioso. La honestidad es un valor, pero la sinceridad siempre, no.  No puede ser.

.- ¿Cuál es tu concepto de felicidad?

La respuesta más inteligente que se me ocurre es, no lo sé. La felicidad es como una especie de anhelo permanente y que tiene muchos ratos. Que hay ratos maravillosos.

Hay una frase compleja pero es simple que es que la vida es de puta madre. La vida mola muchísimo.

Y la felicidad es algo que se debe intentar. Lo importante es la intención. Todo el rato hay que intentar ser feliz, pero tampoco hay que perseguirla, porque es algo muy aburrido.  Parece que si no eres feliz, es que estás haciendo algo mal.

Yo soy un enemigo de la autoayuda, del «si quieres, puedes». Porque yo digo que si quieres puedes, o no puedes. ¿Cómo voy a poder todo?. Si estoy cojo no puedo escalar el Himalaya.

Son mensajes que contaminan un poco la idea de felicidad y son infantiles.

Soy optimista enfermizo, pero realista.

.- Una reflexión para los lectores del portal. 

Desea.

¡¡Somos lo que nos decimos!!

«Hablar no es siempre conversar» decía William Cowper

Cuando era pequeño me reía a carcajada limpia cuando veía que mi madre hablaba a las plantas. Pensaba que estaba loca. Le decía «Si te contesta el geranio, házmelo saber que llamaremos a los periódicos».

Pasados unos años, yo soy el que habla a las plantas.  Menos mal que mi madre no lee el blog , porque sino sería ella quien se reiría en estos momentos de mí.

Hagamos un experimento. Por las calles de las ciudades oímos ruidos, pero si escucharamos a la gente, por las vías principales de nuestra ciudad, cada vez oímos menos a la gente hablar.

Entre los moviles, el estrés que llevamos… se han perdido el sonido de las conversaciones. Hasta hemos llegado a mandar un WhatsApp a una persona que teníamos al lado para que la otra persona que nos acompañaba no lo supiera.

Pero , ¿Qué pasa si vemos a alguien por la calle que habla solo? Lo primero que pensamos, es que está loco. Y si vemos que lleva los cascos, lo siguiente es que está loco.

Como bien dice Luis Rojas Marcos, en su libro «Somos lo que hablamos«, tiene un poder terapéutico más importante del que nos imaginamos, el hablarnos a nosotros mismos.

A las emociones hay que ponerles voz. Y no esperar a que los demás sepan lo que nos pasa.

Muchas veces nos preguntamos y , también en primera persona, como hemos reaccionado ante ese comentario que hemos recibido u observado.  Ponemos como excusa que perdonen por nuestra reacción, pero que estamos estresados.

Cuando realmente, lo que ha pasado es que el globo se ha hinchado de estar comiéndonos nuestras emociones, nuestros miedos,… y cuando menos lo esperamos y con la persona menos adecuada, saltamos.

Lo que tenemos que hacer antes de saltar, es introspección.

Es preguntarnos qué nos pasa, por qué actuamos como estamos actuando, por qué reaccionamos como lo estamos haciendo, por qué tenemos esos ataques de ira o ansiedad…

Somos nuestros propios médicos a la hora de diagnosticar lo que nos pasa. Otra cosa, que hagamos caso al ego, el que nos dice: «Déjate de decirte tonterías, de motivarte y de buenas palabras, porque no vas a conseguir nada. Hablar contigo mismo es de loco, no pienses y haz la pelota a ése, que te irá mejor la vida».

Dejemos de preguntarnos y cuando explotamos, nos preguntamos: ¿Qué ha pasado? Si me hubiera dado cuenta antes, lo hubiera cambiado... En el fondo lo sabías pero no querías focalizarte en la situación, que no es lo mismo, y todo por tu ego, por tu orgullo o por tu miedo.

¿Hace cuánto no mantienes una conversación contigo mismo?

Tranquil@s, las personas más inteligente e inteligentes emocionalmente se hablan a sí mismos, te lo aseguro. Hablarse a uno mismo, es el signo de inteligencia más importante que he visto hasta la fecha.

Tenemos que contar más nuestras penas como nuestros miedos. Nos da vergüenza. Pensamos que nadie nos entenderá y que es mejor , no contar nada, porque los demás ya tienen suficiente con lo suyo, como para aguantar un problema más.

Por tu salud, seguro que tienes a gente que estará encantado de escucharte y acompañarte por el momento que estás pasando. Pero si no es así, que no me lo creo, GRITA.

Veíamos en televisión, como había grupo de trabajadores que iban a los desguaces a darle con todas sus fuerzas con martillos a televisores, coches u ordenadores.  Pues grita tú tambien y luego ten en cuenta si tienes seguro por lo que rompas.

Gritar es soltar adrenalina y es empezar a dejar de lado al modo racional con el que vivimos, dando rienda suelta a las emociones y al lado emocional o subconsciente que tenemos.

Vivimos encorsetados en normas que nos cohíben mostrar nuestras emociones.

No digas esto, no hagas lo otro..y a la hora de expresar nuestras emociones no sabemos cómo hacerlo.

Las de alegría lo sabemos hacer todos, pero tampoco los desmenuces hasta el más mínimo detalle, porque luego te darás cuenta, que no habían sido para tanto.

Por otro lado tenemos las personas que están cada dos por tres excusándose y pidiendo perdon por sus faltas de puntualidad, malos actos en sus trabajos o relaciones. Es un patrón que han aprendido, ya que alguna vez no tuvieron problemas pidiendo perdon, y ahora siguen haciendo lo mismo, sin ser responsables de su vida.

Pero expresar arrepentimiento o reconocer los fallos SINCEROS por parte de uno, hace que el sentimiento de culpa, de la incertidumbre ante lo que nos va a pasar se disipe, ya que esa carga desaparece tras poner voz a nuestras emociones y fallos.  Que no quiere decir te libres del castigo, pero lo afrontaras de otra manera.

¿Y si hablamos de la situaciones en las que por callarnos hemos perdido la oportunidad de decir TE QUIERO a esa tan importante para nosotros? Situaciones en las que no hemos puesto voz a nuestras emociones y sin darnos cuenta, nunca se lo habremos dicho, ya que de un día para otro no se encuentra junto a ti.

No esperes siempre al ultimo momento como con la renta para decir lo que sientes y quieres, porque quizá no haya otra oportunidad.

Este mundo tan visual, no solo somos una imagen, sino también lo que transmitimos. Y no nos damos cuenta, que usamos mal una herramienta importante para mostrar quienes somos y dejar una marca en los demás.

Tú eres el mensaje que transmites. Y si no te motivas a ti mismo, sino te hablas a ti mismo diciéndote porqué lo has vuelto a hacer o qué coño te pasa cuando ves siempre a la misma persona… ¿Qué vas a transmitir a los demás? ¿Qué mensaje vas a dar al exterior si no sabes gestionar tus emociones, alentarte ni preguntarte qué te ocurre?

Un mensaje distorsionado, incoherente y si alguien te entiende, vamos bien.  Porqué sí tú mismo no te entiendes, ¿Alguien que no seas tú tiene ese poder?

Así que recuerda:

  • La relación más duradera que vas a tener es contigo mismo. Así que háblate, escúchate y cuídate.
  • Si no te motivas tú, ¿Quién te va a motivar? Si me vieras antes de una conferencia, como me hablo a mí mismo, dirías que estoy como una cabra, pero luego los trabajos me salen genial .
  • Exprésate antes de explotar. La onda expansiva será menos intensa y seguro que más beneficiosa.
  • Deja tus miedos y orgullos atrás y muestra lo que sientes, puede que no haya un mañana.
  • Habla, Háblate, pero eso si no produzcas dolor de cabeza. Menos es más en muchas situaciones.

¿Cuándo fue la última vez que hablaste contigo mismo?