Las reglas del juego

Para romper las reglas, primero hay que conocerlas bien.

Vivimos llenos de reglas, las reglas de convivencia, las reglas en una pareja,  las reglas para empezar una relación, reglas para dejar a tu pareja, las reglas en tu puesto de trabajo, las reglas de la oferta y la demanda, las reglas del juego, las reglas de la ortografía, las reglas para una educación…incluso nuestras propias reglas personales, que nunca llegaríamos a romper….

¿Pero realmente las conocemos al 100%?

Toda experiencia que vivamos en nuestra realidad,  la interpretaremos a través de nuestras reglas. No conocer el poder de las mismas, nos imposibilitan llegar a ser feliz y llegar a conocerlas, nos puede llegar a transformar nuestra vida.

¿Qué tiene que suceder para que te sientas a gusto contigo mismo? Unos dirán que sienta el cariño de mi gente, otro de mi jefe y otros dirán cosas diferentes…  pero cada vez siento más que no hace falta nada en concreto para estar uno bien o sentirse a gusto consigo mismo.

Seguro que todos conocemos a una persona a nuestro alrededor, que se exige demasiado en todos los ámbitos de su vida, que quieren tener su casa siempre “en punta en blanco”, que si no tienen el mejor coche o la rubia más espectacular a su lado, se viene abajo sino cumplen esas expectativas..

No estoy diciendo que no hay que ponerse unas reglas en todos los aspectos de tu vida, pero depender tu felicidad, en algo en lo cual tú no tienes el total control, dejar tu felicidad en situaciones externas, no creo que sea lo mejor.

Yo he sido el primero, que ante una cita, un concierto o cualquier situación, empezando teniendo unas expectativas muy altas y si dicha situación no cumplía con esas expectativas, salía totalmente decepcionado. ¿Te recuerda alguna situación vivida por ti? ¿Y si en vez de tener esas expectativas, tuvieras las expectativas de pasarlo bien, de disfrutar y ya está? Seguro que acabaras el momento con un mejor sabor de boca que si no ha cumplido las expectativas tan altas que tenias.

Depender nuestra felicidad, de algo que hemos planificado y no puede salir tal cual, no creo que sea lo idóneo.

Nuestras reglas, también nos limitan personalmente. Puedo lanzar una pregunta ahora al aire, como por ejemplo: ¿Te crees inteligente? O ¿Qué es el éxito para ti? y seguro que tendría 200 respuestas diferentes y todas serian válidas según nuestras reglas. Nuestras reglas son el juez y jurado a la vez. Son nuestras reglas  son las que controlan nuestras respuestas en cada momento.

Podrías estar ganando en tu vida, pero tu sistema de reglas, te haría sentirte frustrado, con el ceño fruncido todo el día y sintiéndose herido en cada momento. Y  seguro que repercutirá también en tu pareja, amigos, hijos y demás, en cómo te relacionas con ellos.

Si queremos cambiar nuestra vida, tenemos que cambiar esas reglas que nos limitan,  que nos impiden llegar al éxito.

¿Qué reglas te has impuesto que son imposibles de cumplir?

¿Tienes que tener todo bajo control? ¿Todo tiene que hacerse en tu empresa según tu mandato? ¿En la casa tiene que estar  todo pulcro o no paras hasta que lo esté? ¿Tienes que sentir seguridad en cada ámbito de tu vida?…. y muchas más, son todo reglas asociadas al dolor, y me imagino que no querrás tú el dolor, sino el placer y la satisfacción, ¿no?.

¿Como sabremos si nos limita esa regla?

1.- Si es imposible de satisfacer

2.-  Si tú mismo no puedes controlar que se satisfaga o no esa regla.

3.-  Si solo existen un número muy pequeño de formas de sentirnos bien y muchas de sentirnos mal.

Ahora pregúntate, ¿cuándo fue la última vez que te enfadaste? ¿Te enfadaste con esa persona realmente o te enfadaste porque hizo algo, dijo, o no dijo, o no hizo cuando creías que tenía que haberlo dicho o hecho? Si te das cuenta, realmente será lo último, porque quebranto alguna norma que tienes tú y él o ella no lo sabían. Así que la próxima vez, que te pase, date cuenta que la persona  esta infringiendo una regla que él a lo mejor no la conoce y no estás enfadado por su comportamiento.

Asi que si quieres que vaya todo fluidamente en todas las aéreas de tu vida, cambia esas reglas que te limitan,  comunica tus reglas a todos e intenta investigar la de los demás, ganaras mucho y te ahorraras muchas discusiones.

Y no seas como cualquier tonto como decía Thoreau: “Cualquier tonto puede establecer una regla… y a cualquier tonto puede importarle”.

5 comentarios

  1. Francisco angel · junio 16, 2011

    wuau!! genial, buff, este comentario te hace estremecer el cuerpo y te despierta nuevas sensaciones de pensamientos cuando te sientes un poco frustrado, es cierto, mejor reflexionar despues sin hacer mucho para evitar que te fustren los demas, porque luego los demas son humildes y rectifican y en el fondo te das cuenta que lo que mas quieres es aquellas emociones que te hacen sentir cuando te quieren no cuando les importa las reglas.. un abrazo gracias

    • El Principio de un Comienzo · junio 16, 2011

      Te recomiendo a Robbins, en cuestion de las reglas del juego, es el mejor en este campo. Conocer las reglas de tu pareja, de tu familia, de si eres jefe.. de tus empleados, sabras de ante mano que quieren, que buscan en la vida, cuales son sus sueños, sus prioridades, la relacion ira mucho mejor, sera mucho mas provechosa en todos los sentidos y te ahorraras muchos posibles disgustos, asi que comienza preguntando a la gente de tu alrededores sus normas, sus reglas, los conoceras mucho mejor, más que preguntandoles que tal ha ido el dia…

  2. Pingback: El Poder de las Reglas | Jacarandá Consultores
    • El Principio de un Comienzo · enero 16, 2012

      Hola Juan Ignacio:
      Que tal? Como estas? Deseo que muy bien.
      Muchas gracias por ponerte en contacto conmigo. He leido tu articulo y me ha gustado mucho. Mis enhorabuenas.
      Cualquier cosa en la que pudiera ayudaros, será un placer. Un fuerte abrazo.

  3. Hola! http://jacarandaconsultores.com/el-poder-de-las-reglas/ publiqué un post al cual hago referencia a este ya que tienen un enfoque complementario.

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.