¡¡Evangelios, Influencers y Branding!!

Lo que construye la Marca no es el mensaje, es la experiencia que se vive con ella” dice Alex Pallete.

Nos quejamos de los símbolos religiosos, y cada vez que enciendo el ordenador, veo a más gente intentando evangelizarnos.

Pero ante eso, no decimos nada.

Ves mensajes del tipo: “ Promulga nuestra filosofía por todo el mundo, sólo obtendrás beneficios..Estudia con nosotros y podrás vivir como nosotros lo hacemos…Acude a nuestro evento y ya nada será lo mismo en tu vida”.

Sólo les falta poner de fondo el Aleluya de Haendel.

Nos están anunciando la buena nueva. Lo que todos los hombres hemos estado esperando, la llegada de su evento, de su producto,… que nos salvará la vida y ya podremos ser felices, comiendo perdices el resto de nuestras vidas.

Esta semana, mientras estaba realizando un proceso de transformación de la cultura organizativa, en dos empresas diferentes, me pidieron lo mismo: “¿Cómo podemos hacer que todo el mundo piense en nosotros y nuestro producto? ”

Es el sueño de toda empresa y profesional. Que cuando pensemos en un tipo de producto o servicio, No nos tendría que hacer falta nada, vendría a la mente nuestro producto, servicio, nombre..

También la palabra evangelizar, es otra palabra que prostituimos.

Evangelizar, es transmitir a quien te escucha, que una buena nueva, está a punto de aparecer.

¿Qué es lo que nos decían que hacía Jesús y sus Apóstoles? Evangelizar explicando una nueva forma de vivir.

Tanto si nos fijamos en Jesús, como en Apple, no nos están “vendiendo” su producto, ESTÁN LLEGANDO A NUESTROS CORAZONES.

En la actualidad, evangelizar, es sinónimo de “SI PUEDO PISAR LA CABEZA A MI COMPETENCIA, LO PIENSO HACER”.

Si yo leo:” Ven con nosotros, y serás como yo” (Eslogan que vi hace poco, de un “gurú” del amor), no está evangelizando de ninguna manera, no está llegando a mi corazón, más bien me está dando miedo.

¿Con qué se está jugando?

Con el miedo que tiene las personas en estos momentos. Con la desesperación de saber que están mal y que quieren un cambio. Y ya si les ofrecemos luces de colores chulos, carteles de neón y palabras que quieren oír… Ya tenemos una persona que se unirá a nuestro bando…

Pero no por mucho tiempo, te lo aseguro… La gente no es tonta.

Pero en una sociedad en la que aparentar, en vez de ser, en la de comprar seguidores en redes sociales y no llegar al corazón, son leitmotiv de la misma, ¿Qué vamos a esperar?

Que si podemos “manipular” a los posibles clientes  para que compren nuestro producto, y así “adecentar” la cuenta de resultados… LO HACEMOS.

Siempre por el método rápido, no por el que produce los resultados de verdad.

¿Y por dónde se empieza?

Por los CORAZONES de los clientes.

Cuando llegan a tu corazón, DE VERDAD, sin trampas, no hace falta que les pidas un favor, tú te predispones a hacer lo que sea, por esa persona, por esa empresa.

¿Por qué?

Porque han sabido entender QUÉ necesitabas y PORQUÉ lo necesitabas.

No me cansaré de repetirlo, si no tienes un PORQUE, nunca llegarás a ser como esas marcas que llevan años y siglos en nuestra mente.

No quieren una “fortuna eventual”, sino que los clientes se sientan afortunados y caminen con nosotros en la vida de la empresa, porque lo que les inspira los productos, cómo se sienten, el estilo de vida promulgamos…

Los clientes hablan de cómo les beneficia esos productos, ese estilo de vida y la competencia, les importa un bledo. Sólo tienen ojos para ti, como estás enamorado.

Pero por muchas herramientas que tenemos para diferenciarnos de los demás, no sabemos cómo utilizarlas.

Vendemos … El mismo perro pero con diferente collar.

¿Quieres que tus clientes, evangelicen tus productos sin que tú les digas nada?

Haz que tus productos produzcan una diferenciación y un valor, respecto a los demás. Que produzcan ALGO, que remuevan cuando los veas, no algo parecido a: “Una copia barata más que se parece a …”.

Hacemos copias de lo que triunfa, y pensamos que así, también nosotros triunfaremos. Y estamos muy equivocados. Triunfaremos en lo que sea, cuando seamos nosotros mismos, cuando demos a los demás, 1% más de lo que dan la competencia. Cuando produzcamos un antes y después tras probar el producto, antes nunca vivido.

Solamente así, nuestros clientes, se convertirán en nuestros evangelizadores, porque mientras tanto, seremos uno más.

Haz productos maravillosos, con corazón y te digo que todo será más fácil.

Algunas empresas y profesionales me preguntan: “¿Pero qué pasa? Sé que mi producto se diferencia de los demás y tiene un valor incalculable… No lo entiendo”…

Dejemos de fijarnos en lo que pensamos uno mismo sobre nosotros y nuestros productos; y ESCUCHEMOS DE VERDAD, a los clientes que nos compraron y a los que nos podrían comprar.

Quizá aprendamos acallando el ego y escuchando a los demás.

Así que por favor:

.- Antes de pedir de evangelizar o que lo hagan, pregúntate si tu producto llega al corazón de los clientes.

.- Antes de pedir que evangelicen en tu nombre, pregunta si tu producto esta diferenciado y da valor, respecto a los demás.

.- No pienses que los clientes son tontos. Caerán 1 vez, pero no habrá una 2º, sino haberlos satisfecho de CORAZÓN, DE VERDAD, en la 1º. No vendas algo que ni tú mismo comprarías.

.- No hará falta que pidas que evangelicen en tu nombre, la cara de tus clientes, ya lo dirá por sí mismos.

.- Escucha siempre a tus clientes, seguro que aprenderás más que de tu Ego.

Y si no evangelizan tus clientes, nos sumamos a un influencer.

Nos unimos a personas, que por el número de seguidores que tienen en redes sociales, o Agencias de Comunicación, pensamos que nos van a llevar al Olimpo de la Fama y a la facturación constante por 10.

¿Qué pasaría si fuéramos nosotros los embajadores de nuestro producto y NO una persona, que ni lo conoce, ni lo ha probado ni sentido? ¿O es que por un número de seguidores, ya determina lo que es bueno o malo? ¿Es que esa persona va a tener más brillo en los ojos que nosotros, que lo hemos creado?

¡¡NOOO!!.

Y ahora para colmo han creado un curso de cómo tratar con influencers..NO COMMENT.

Para los influencer (seremos un negocio más, para algunos), dirán lo que creamos que deben decir, se harán la foto que necesitemos, pero como nosotros mismos, no expresaran lo que sentimos que hará el producto a la sociedad. Pero en una sociedad donde la imagen manda, donde el efecto halo, por juntarnos con quien la tiene más grande (hablo de seguidores), hará creer que somos los mejores.

Lo único que conseguiremos será una portada en revistas que dentro de 1 año nadie se acordará.

Si quieres una publicidad con resultados fuertes y constantes, SE TÚ MISMO EL QUE PROTAGONICE EL ANUNCIO. Nadie cómo tú será quien deslumbre más.

Así que recuerda:

Evangelizaras a todo el mundo, llegando al corazón de tus clientes. Serán tus clientes quienes, sin que tú digas nada, expandirán la buena nueva de tu producto. Y si ya eres el protagonista de toda acción publicitaria, te aseguro que tienes ante ti una marca, un producto, que dejará la huella que tú sabes que quieres dejar en todo corazón.

¿A qué esperas? ¿Eres el evangelizador de tu propia marca? Recuerda: Las Marcas NO se CONOCEN, SE SIENTEN.

Podéis adquirir “Liderazgo Canalla. Libera tu lado más rebelde” A través de Amazon y la tienda de Versos y Reversos.

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